En un esfuerzo por abordar la seguridad vial y la movilidad de las personas mayores, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha anunciado una serie de cambios significativos en los periodos de vigencia de los carnés de conducir para este segmento de la población. Estas modificaciones buscan no solo garantizar la seguridad en las carreteras, sino también fomentar la libertad y la movilidad de nuestros ciudadanos de la tercera edad.
Contexto y Desafíos
El envejecimiento de la población es un fenómeno global, y España no es la excepción. En 2019, el 28% de los fallecidos en accidentes de tráfico en nuestro país eran mayores de 65 años. A nivel europeo, la situación es igualmente alarmante, con un 30% de las víctimas mortales en accidentes viales perteneciendo a este grupo etario, cifra que se eleva al 50% cuando hablamos de fallecidos entre peatones y ciclistas. Estas estadísticas, de por sí impactantes, se tornan aún más preocupantes ante las proyecciones demográficas que auguran un aumento significativo en la población de 60 años o más.
La Visión de la DGT
En palabras de María José Aparicio, subdirectora de la DGT, «debemos proteger a las personas mayores, pero siempre fomentando su movilidad, seguridad y libertad». La DGT reconoce que la pérdida de aptitudes psicofísicas es un desafío importante y, en consecuencia, se compromete a revisar los periodos de vigencia de todos los permisos de conducir, con un enfoque particular en aquellos otorgados a personas mayores. La seguridad en nuestras carreteras es una prioridad, y esta revisión es un paso esencial para alcanzar este objetivo.
Un Nuevo Enfoque en la Movilidad de Personas Mayores
José Ignacio Lijarcio, director de proyectos de Fesvial, señala que el panorama ha cambiado drásticamente para nuestros mayores. La esperanza de vida ha aumentado, y los mayores de 65 años son más activos que nunca. Si bien es cierto que no todos son nativos tecnológicos, es imperativo dirigir esfuerzos para facilitar su adaptación a las nuevas tecnologías. El aprendizaje social y generacional se convierte en una herramienta valiosa para acompañar a nuestros mayores en esta transición.
Desafíos Globales
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que la población mundial de 60 años o más alcanzará los 2.000 millones en 2050. En la Unión Europea, se prevé que para el año 2040, el 27% de la población tendrá más de 65 años. Estos datos destacan la importancia de abordar de manera efectiva la movilidad de las personas mayores en nuestras carreteras.
La Necesidad de Actualización
Desde la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE), se ha destacado la importancia de la actualización periódica de los conocimientos y habilidades de las personas mayores que poseen permisos de conducir. Tras la pandemia, muchas personas de cierta edad que habían estado inactivas en la conducción han optado por regresar a la autoescuela antes de volver al volante. Esta iniciativa refuerza la idea de que la seguridad vial y la actualización son elementos cruciales.
Factores Determinantes
Bonifacio Martín, secretario general de la Asociación Española de Centros Médicos Psicoténicos (ASECEMP), destaca que la edad es un factor que influye en la pérdida de facultades. La vista, en particular, es un órgano vital en la conducción, y su deterioro puede dar lugar a denegaciones y condiciones restrictivas en los permisos de conducir. En lugar de establecer una edad límite para conducir, Martín aboga por evaluar las condiciones psicofísicas adecuadas, sin importar la edad.
Perspectiva Futura
El director general de Tráfico, Pere Navarro, ha adelantado la revisión de los plazos y las pruebas psicofísicas en la renovación de los carnés de conducir para personas de edad avanzada. Más de cuatro millones de personas mayores de 65 años mantienen su permiso de conducir en España, lo que representa más del 15% del censo de conductores. Este proceso de revisión será fundamental para garantizar la seguridad y la movilidad de todos los ciudadanos.
En resumen, la DGT se encuentra en la vanguardia de la promoción de la seguridad vial y la movilidad de las personas mayores. La revisión de los periodos de vigencia de los carnés de conducir es un paso esencial para afrontar los desafíos actuales y futuros. El enfoque en la actualización de conocimientos y habilidades, junto con la evaluación de las condiciones psicofísicas, garantizará un entorno de conducción seguro para todos, independientemente de su edad.
¿Qué opinas de estos cambios en la renovación del carné de conducir para personas mayores? ¿Crees que son necesarios para mejorar la seguridad vial? Comparte tus opiniones y pensamientos en los comentarios.